Durante mi experiencia como director financiero externo, he colaborado con muchos responsables de empresas que probablemente tenían las mismas inquietudes que tú a la hora de decidirse por la contratación de este servicio.
Inicialmente, no visualizaban los beneficios que podrían tener estos servicios, que te cuento en este artículo. Sin embargo, estos miedos se fueron disipando poco a poco, hasta acabar abriéndome las puertas de su negocio y contando conmigo para todos sus nuevos proyectos.
Por ello, es fundamental encontrar a un profesional que cumpla una serie de criterios necesarios para disipar estos miedos iniciales.
Los cinco criterios para elegir a un director financiero externo
Confianza
Probablemente el criterio más importante. Un cargo de responsabilidad, aunque sea a tiempo parcial y de forma externa, debe tener un historial de referencias amplio, que te proporcione confianza y que ésta se vea refrendada posteriormente con su trabajo.
Experiencia
Sin duda, en un sector de actividad tan específico como el de la dirección financiera, la experiencia es esencial. Haber trabajado en diversas empresas como director financiero interno, conociéndolas por dentro y, posteriormente, con numerosos clientes de forma externa se antoja imprescindible.
Además, esto implica necesariamente, tener una interesante red de contactos que se pone a tu disposición.
Formación (continua)
El director financiero se sitúa en un nivel de supervisión, diferente al de las gestorías o al del departamento de administración, por lo que debe tener gran capacidad técnica y estar al tanto de todas las novedades que puedan afectar a la empresa.
Cercanía
Este servicio requiere que se trabaje de forma muy cercana ti, el responsable de la empresa, con reuniones periódicas y una amplia disponibilidad. De hecho, una vez que se entra en dinámica de trabajo es habitual compartir todas las decisiones que afectan al negocio e ir de la mano para tomar el camino donde converjan los intereses del negocio y los financieros.
Coste
En condiciones normales un profesional con estas condiciones representaría un coste de más de 50.000 euros al año para tu negocio. Aquí se pone de relieve la utilidad de poder realizar la contratación de forma externa.
El coste se ve ampliamente reducido a una cuota mensual asequible para cualquier pyme. Además, en la mayoría de las ocasiones los beneficios obtenidos por la contratación del servicio acaban superando al propio coste de una manera tangible.
¿Buscas un director financiero externo para tu negocio?
Si te interesa dejar en buenas manos las finanzas de tu empresa y estás buscando un director financiero que te ayude en tu empresa, estoy a tu disposición.
Escríbeme para preguntarme tus dudas y me pondré en contacto contigo para que me cuentes tu caso y ver cómo puedo ayudarte.
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